En apenas cinco días, entre el domingo y el jueves, se pudo ver a tres vehículos a contramano en la ruta 9, en la autopista que une la capital con El Cadillal: una Nissan Frontier, un Fiat Siena y un Volkswagen Fox. El conductor de la camioneta, José Javier Martínez de Goñi, estuvo detenido por contravención policial; el chofer del Fiat se dio a la fuga; y el joven de 21 años que manejaba el VW sólo recibió un acta de infracción.
Esta situación llevó a reflexionar a Alberto Narz, un docente salteño que el domingo al mediodía se encontró de frente con Martínez de Goñi. “Se me venía encima, de la mano izquierda. Si pensaba qué tenía hacer hoy no estaba acá; pensaba que me partía al medio”, explicó.
Pese a que lo denunció, Narz invitó al conductor de 34 años a conocerse. “Es para que vea que somos personas como él. Tenemos una familia, suegros, cuñados, vecinos, primos, amigos, que no somos una cuenta de Facebook o Instagram. Quizá esa foto que tomé de mi hija en Tucumán el sábado a la tarde noche hubiese sido la última que tenga de ella, sola o con sus padres, o la última de todos. Esto no es un juego. A la hora de subirnos a un auto a veces tenemos la vida del otro en nuestras manos, o en nuestro pie derecho”.
Por esto, Narz agregó que no servirá solamente castigar el hecho: “El ser humano es el único que tiene la capacidad de razonar. No se trata de dejar todo en el olvido, pero también tenemos una parte humana y la ponemos a consideración de este señor”.