Un juez del Tribunal Supremo del Reino Unido aprobó hoy el traslado a un hospicio para enfermos terminales del bebé Charlie Gard, donde este morirá "inevitablemente" poco después, informaron hoy medios británicos.
El "bebé Charlie", de 11 meses, sufre una rara enfermedad genética llamada síndrome de depleción de ADN mitocondrial, que afecta especialmente al cerebro, y necesita respiración y alimentación asistida para vivir.
La decisión del juez se produjo después de que los padres de Charlie, Chris Gard y Connie Yates, y los médicos del Great Ormond Street de Londres, donde está internado el bebé, no lograran llegar a un acuerdo, reportó la agencia de noticias DPA.
La pareja quería más tiempo con el niño y había pedido que muriera en su casa.
Yates y Gard lucharon durante cinco meses para que su hijo pudiera recibir un tratamiento experimental en Estados Unidos, pero los médicos que lo atienden se mostraron en cambio a favor de desconectar al bebé para que no sufriera, pues consideran su enfermedad irreversible. 

Un juez del Tribunal Supremo del Reino Unido aprobó hoy el traslado a un hospicio para enfermos terminales del bebé Charlie Gard, donde este morirá "inevitablemente" poco después, informaron hoy medios británicos.

El "bebé Charlie", de 11 meses, sufre una rara enfermedad genética llamada síndrome de depleción de ADN mitocondrial, que afecta especialmente al cerebro, y necesita respiración y alimentación asistida para vivir.

La historia de Charlie Guard, el bebé que sufre una extraña enfermedad que conmueve al mundo

La decisión del juez se produjo después de que los padres de Charlie, Chris Gard y Connie Yates, y los médicos del Great Ormond Street de Londres, donde está internado el bebé, no lograran llegar a un acuerdo, reportó la agencia de noticias DPA.

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La pareja quería más tiempo con el niño y había pedido que muriera en su casa.

Yates y Gard lucharon durante cinco meses para que su hijo pudiera recibir un tratamiento experimental en Estados Unidos, pero los médicos que lo atienden se mostraron en cambio a favor de desconectar al bebé para que no sufriera, pues consideran su enfermedad irreversible.