Un hombre de 50 años dejó estacionada en doble fila su camioneta, dejó a su hija en una clase y volvió al vehículo; en ese momento, vio que un desconocido le hacía juego de luces, le tocaba bocina y lo insultaba a los gritos.

Según la denuncia, el conductor de la camioneta no le prestó atención y llevó a su esposa al trabajo. Ya en al zona sur del centro, el hombre que le gritaba le cruzó el vehículo, lo insultó y le tiró gas pimienta en los ojos.

Al ver esta situación, la esposa del hombre agredido intentó pararse frente al vehículo del atacante para que no huyera, pero casi resulta atropellada. Sin embargo, la pareja tuvo un golpe de suerte; un policía que se encontraba de parada en el lugar vio todo, y pese a que no llegó a intervenir, tomó los datos del automóvil del fugado.