En Bulgaria los equipos Botev Plovdiv y Ael Limassol organizaron un partido amistoso como parte de la pretemporada que transitan por estos días. Sin embaro, los más curioso de todo no fue el encuentro en sí ni el resultado, 3-1 en favor de Limassol.

¿Qué pasó? Pasada la media hora del primer tiempo, una vaca entró por detrás del arco que defendía el portero búlgaro Ivan Cvorovic y mientras los jugadores decidieron retirarse del campo atemorizados, los fanáticos se riéron de la situación.

Al no poder encontrar una salida, la vaca se alteró hasta que finalmente un pastor entró al terreno de juego y, con ayuda de un perro guía, la sacó del campo para que el juego se reinice entre risas pero con total normalida.