Gisela Berger volvió a hablar ante las cámaras tras las polémicas declaraciones sobre el su relación con el ex candidato a presidente, Daniel Scioli. La modelo se reunió con su madre y una amiga en un bar y en el camino dejó ver un poco su pancita de tres meses. 

"Estoy angustiada y pasando por una situación complicada", declaró la rubia cuando fue interceptada por un notero en la puerta de su casa. Y continuó: "salgo porque no tengo empleados y tengo que comprar mis cosas. Aunque tenga dolor, debo salir a buscar mis cosas como cualquier persona común". 

Berger además aseguró que no volvió a tener contacto con el padre de su hijo.