Susy Shock nació en Buenos Aires. Pero entre las tantas mutaciones que ha tenido y que tiene su identidad, adoptó como propio el latir de las cajas chayeras del norte argentino. Se define a sí misma como “artista trans sudaca”, aunque dentro de las categorías usuales del arte -si es que a Susy le cabe alguna categoría- es actriz, escritora, cantante y docente.
Hoy a las 20, Susy Shock presentará su libro “Crianzas” en el Museo de la Universidad Nacional de Tucumán (MUNT, San Martín 1.545). Mañana a las 22.30 brindará un recital junto a La bandada de colibríes en el Teatro Municipal Rosita Ávila (Las Piedras 1.500).
Se trata del comienzo de su gira norteña que incluye las provincias de Salta y Jujuy, y que terminará nuevamente en Tucumán el martes 16, a las 21.30, en Pangea (Laprida 289). Allí presentará “Ser pasiva me cambió la vida”, una antología de poemas y relatos.
Artista transexual, Susy Shock lleva como estandarte la defensa visceral y performática de los derechos del colectivo LGBT y de la diversidad infinita del ser humano. Editó el “Poemario transpirado”, declarado de interés para la promoción y defensa de los Derechos Humanos por la Legislatura porteña; “Relatos en Canecalón” y ahora “Crianzas. Historias para crecer en toda la diversidad”, una compilación de los 28 episodios de un micro radial que emitió durante 2014 la cooperativa Lavaca. El libro cuenta con un epílogo que es una carta de Susy a su maestra de la escuela primaria, la señorita Dolores, y con ilustraciones en tapas e interiores de Anahí Bazán Jara, hija de la autora.
Entre sus varias actividades, Susy participó como redactora de una columna en Soy, el suplemento de diversidad sexual del diario Página/12, colaboró con varias revistas culturales y actualmente escribe columnas en la Revista MU (de la cooperativa Lavaca) y una novela de folletín titulada La Loreta.