WASHINGTON.- Las reformas tributarias propuestas por el presidente, Donald Trump, suponen “el mayor recorte de impuestos” y “la mayor reforma fiscal” de la historia de Estados Unidos, según anunció el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin. La modificación incluye “recortes masivos” de impuestos con el objetivo de “impulsar el crecimiento económico” y mejorar la competitividad de las empresas, dijo Mnuchin en Washington durante un acto. “Tenemos una oportunidad única para hacer algo realmente grande”, dijo por su parte Gary Cohn, principal asesor económico de la Casa Blanca, tras una reunión con Mnuchin.

Según el secretario del Tesoro, el Impuesto de Sociedades se bajará del 35% al 15% y también habrá rebajas para los ciudadanos y una simplificación del sistema impositivo. El plan tiene por objeto suprimir de inmediato el Impuesto Inmobiliario y desechar el Impuesto Mínimo Alternativo, un recargo para las personas con altas deducciones de sus ingresos imponibles.

El Impuesto sobre las Ganancias de Capital, o Rendimiento de la Inversión, se reducirá del 23,8% al 20%, y la tasa más alta de Impuestos Personales del 39% al 35%.

La Casa Blanca anunció que mantendrá reuniones durante el mes de mayo para “escuchar” a los contribuyentes, mientras el Congreso continúa trabajando para “desarrollar los detalles de un plan que proporcionará un alivio masivo de impuestos, generará puestos de trabajo y hará que Estados Unidos sea más competitivo”.

La ambiciosa propuesta fiscal se anuncia tras el fracaso del mandatario de derogar y sustituir “Obamacare”, la reforma de salud puesta en marcha por Barack Obama.

Trump había adelantado días pasados que ayer haría un “gran anuncio” sobre la reforma fiscal. La baja de impuestos a los ciudadanos y empresas fue una de las promesas de la campaña electoral, que habló de una “reforma fiscal histórica”. Las masivas reducciones beneficiarían, al mismo tiempo, a la clase media en EEUU. (DPA)