El paso del Dakar por Tucumán dejó imágenes llamativas. Algunas de ellas se dieron en sobre la avenida Papa Francisco cuando distintos competidores detuvieron la marcha de sus camionetas y camiones para lavar los vehículos en San Cayetano, a unas cuadras del acceso al vivac instalado dentro del hipódromo.

Los jóvenes de los lavaderos ilegales trabajaron durante algunas horas bajo un intenso calor para dejar brillantes a los vehículos cubiertos de tierra luego de la segunda etapa de competencia.

A medida que llegaban los vehículos comenzaron a estacionarse en distintos puestos en busca del mismo servicio, ante la atenta mirada y el asombro de los vecinos del lugar. Algunos pilotos, incluso, quitaron las ruedas y otras piezas de las máquinas para lavar los autos a fondo.