Una azafata boliviana se convirtió hoy en la última persona que sobrevivió a la tragedia aérea delclub de fútbol brasileño Chapecoense en ser dada de alta del hospital de Colombia donde se recuperó de múltiples heridas y fracturas. 
La auxiliar Ximena Suárez sufrió una fractura en la mano derecha, una lesión en un tobillo y heridas en diversas partes, pero los médicos de la Clínica Somer, ubicada en el municipio de Rionegro, próximo a Medellín, consideraron que ya puede volver a su país. 
Según informó DPA, funcionarios del centro médico indicaron que la azafata y los familiares que la acompañan en Colombia viajarán a Bolivia el próximo domingo. 
La tragedia ocurrió el 28 de noviembre, cuando el avión chárter que transportaba a Chapecoense hacia Medellín se estrelló en un cerro del departamento de Antioquia (noroeste) tras quedarse sin combustible. 
En el accidente murieron 71 personas, entre ellas 19 jugadores, todo el cuerpo técnico, varios dirigentes del club, invitados especiales y periodistas. 
Solo seis personas sobrevivieron: los futbolistas Jackson Follmann, Alan Ruschel y Helio Neto, un periodista y dos miembros de la tripulación boliviana, todos los cuales ya retornaron a sus países, a excepción de Suárez. 
Una azafata boliviana se convirtió hoy en la última persona que sobrevivió a la tragedia aérea delclub de fútbol brasileño Chapecoense en ser dada de alta del hospital de Colombia donde se recuperó de múltiples heridas y fracturas. 

La auxiliar Ximena Suárez sufrió una fractura en la mano derecha, una lesión en un tobillo y heridas en diversas partes, pero los médicos de la Clínica Somer, ubicada en el municipio de Rionegro, próximo a Medellín, consideraron que ya puede volver a su país. 

Según informó DPA, funcionarios del centro médico indicaron que la azafata y los familiares que la acompañan en Colombia viajarán a Bolivia el próximo domingo. 

La tragedia ocurrió el 28 de noviembre, cuando el avión chárter que transportaba a Chapecoense hacia Medellín se estrelló en un cerro del departamento de Antioquia (noroeste) tras quedarse sin combustible. 

En el accidente murieron 71 personas, entre ellas 19 jugadores, todo el cuerpo técnico, varios dirigentes del club, invitados especiales y periodistas. 

Sólo seis personas sobrevivieron: los futbolistas Jackson Follmann, Alan Ruschel y Helio Neto, un periodista y dos miembros de la tripulación boliviana, todos los cuales ya retornaron a sus países, a excepción de Suárez.