Uno de los episodios más trágicos de la historia reciente colombiana se vivió el 6 de noviembre de 1985, cuando un comando guerrillero del Movimiento 19 de abril (M-19) tomó el Palacio de Justicia, incendió las instalaciones, mató a decenas de magistrados (incluso miembros del máximo tribunal y empleados) y fue abatido por el Ejército que atacó las instalaciones con armas pesadas, sin tener en cuenta que en su interior había civiles desarmados ajenos a todo combate. En total murió un centenar de personas y hubo una docena de desaparecidos (algunos cuerpos fueron identificados en fosas comunes años después), lo que motivó juicios y condenas a militares.

Sobre ese hecho real se estructura “Siempre viva”, la película que abrirá la sección oficial en la competencia del Festival Tucumán Cine Gerardo Vallejo esta tarde, con su primera función a las 18. El encuentro fue inaugurado anoche, al cierre de esta edición, con la película “Magallanes”, fuera de la puja por el premio a la mejor ópera prima latinoamericana, por el que pujan 11 producciones.

El episodio sirve de marco para contar la crisis de una familia en bancarrota, que está a punto de perder la casa que comparten con un matrimonio y un cuenta propista. La salvación para todos es Julieta, la menor del grupo variopinto que integran desde un payaso hasta una madre desesperada. Acaba de graduarse de abogada y sale a trabajar a los tribunales, como todo día común y corriente. Sólo que no lo es, y que lo que pasará signará a los hogares colombianos. Nadie sabrá del destino de la joven (quizás fue una desaparecida más), y con él se esfuman las ilusiones de todos.

La película de Klych López se basó en una obra teatral de Miguel Torres. El filme se concluyó a partir de un sistema de pequeñas donaciones del público, sin apoyo de empresas ni grandes instituciones. Fue nominada por Colombia a los Premios Iberoamericanos de Cine en los rubros mejor ópera prima y mejor interpretación masculina, para el trabajo de Andrés Parra.

TRES PELÍCULAS PARA HOY

• Proyecciones en el Espacio Incaa de la sala Orestes Caviglia (San Martín 251). Entradas: $10.