Tras la muerte del cura Juan Viroche, legisladores de la oposición pidieron la intervención de la comuna de La Florida, donde vivía el sacerdote. “No todo lo que pasa allí es culpa de las autoridades comunales, pero es evidente que no velaron por los intereses de carácter local, tal como establece la ley de comunas”, señaló el legislador Eudoro Aráoz. La delegada comunal es Inés Gramajo, esposa del ex delegado Arturo “Chicho” Soria. Según se cree, ambos estaban enfrentados con el sacerdote fallecido.