Chen Yinxi, es un estudiante chino con 27 años que construyó su propio superdeportivo con su impresora 3d y con solo una inversión de 4500 euros.
Este lujoso vehículo lleva mayor parte de su presupuesto en la espectacular carrocería y en el sistema de apertura de las puertas tipo murcielago. Por esto, la mecánica de esta máquina se tuvo que conformar con lo mínimo, por lo que solo alcanza una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora.

Chen Yinxi es un estudiante chino de 27 años que construyó su propio superdeportivo con su impresora 3D. Su inversión fue de apenas 4.500 euros.


Este vehículo lleva mayor parte de su presupuesto en la carrocería y en el sistema de apertura de las puertas tipo murcielago. Por esto, la mecánica de esta máquina es mínima: solo alcanza una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora.