Ayer, en horas de la tarde, una mujer recibió un llamado de teléfono del preceptor de la escuela a la que asiste su hijo, de 14 años, quien le advertía que el menor estaba descompuesto en el baño.
La madre llegó en minutos al establecimiento ubicado en la zona sur de San Miguel de Tucumán y encontró a su hijo en el baño, que estaba siendo asistido por la directora y el preceptor. Ambos le indicaron que la descompostura se habría producido porque el adolescente habría estado consumiendo alguna bebida alcohólica en la puerta de la escuela.
De acuerdo a la denuncia de la mujer, se acercó a su hijo y detectó que no tenía olor a alcohol y que habría consumido algún tipo de sustancia que le produjo estado similiar al de la ebriedad. Ante ello, hizo el reclamo a las autoridades del establecimiento, sin que se le diera alguna respuesta.

Ayer, en horas de la tarde, una mujer recibió un llamado de teléfono del preceptor de la escuela a la que asiste su hijo, de 14 años, quien le advertía que el menor se encontraba descompuesto.

La madre llegó en minutos al establecimiento ubicado en la zona sur de San Miguel de Tucumán y encontró a su hijo en el baño, quien estaba siendo asistido por la directora y el preceptor. Ambos le indicaron que la descompostura se habría producido porque el adolescente habría estado consumiendo alguna bebida alcohólica en la puerta de la escuela.

De acuerdo con la denuncia de la mujer, se acercó a su hijo y detectó que no tenía olor a alcohol y que habría consumido algún tipo de sustancia que le produjo un estado similiar al de la ebriedad. Ante ello, hizo el reclamo a las autoridades del establecimiento, sin que se le diera alguna respuesta.