Hoy será la primera vez que Javier Mendoza pise suelo tucumano. Quizás para algunos hinchas “Decanos” también signifique la primera vez que escuchan su nombre, pero resulta más extraña la situación del primer refuerzo de Atlético en este mercado de pases de invierno, al haber nacido en una vecina provincia.

“Nunca fui a Tucumán”, reconoce con algo de culpa el volante ofensivo de Gimnasia y Esgrima La Plata, que llega a Atlético en calidad de préstamo por un año. Mendoza nació en Tartagal, pero su escaso vínculo con el Noroeste tiene una explicación. Apenas cumplidos los 13 años partió hacia Rosario y se quedó a vivir allí. Hizo infantiles e inferiores en la escuela de Jorge Griffa y luego pasó al “Lobo” platense, su casa hasta hoy. En realidad lo seguirá siendo (su pase seguirá siendo de Gimnasia), pero por un año vivirá en 25 de Mayo y Chile.

¿Por qué la mudanza? “Busco continuidad, algo que en Gimnasia no tengo. Además, me gustó mucho cómo jugó Atlético el torneo pasado. Es un equipo muy interesante y su forma de atacar me encanta. Siempre con mucha gente”, elogió al equipo de Juan Manuel Azconzábal, con quien todavía no habló.

Esa charla se concretará cuando el plantel regrese a Tucumán luego de la pretemporada en Salta y el futbolista firme el contrato que lo ligará a la institución. Mendoza llegará a la provincia a primera hora para completar los trámites.

Otro de los partidos que vio Mendoza fue el del domingo, ante Defensores de Belgrano. Ahí no importó que el sistema ofensivo no haya sido el que lo sedujo, sino las 12.000 personas que acompañaron al equipo. “Es una buena plaza. Vi el partido por la Copa Argentina. Lo sigue mucha gente”, expresó. La cercanía con su Tartagal nativo también entró en el combo de la decisión. “Tener cerca a la familia es algo importante”, dijo el jugador, que hoy se convertirá oficialmente en el primer refuerzo de Atlético.