En la segunda mitad del año no se esperan grandes cambios en el nivel de consumo masivo, ya que la inflación seguirá en niveles altos. A esto se suma la disparidad en los precios de los bienes y de los servicios de la economía. Por todo esto, según explicó Paloma Bokser, titular del Centro de Educación al Consumidor (CEC), los consumidores deben mantener, a la hora de comprar, las conductas inteligentes y selectivas que se consolidaron en el primer semestre del año, con el objetivo de ahorrar y de mejorar el rendimiento de los salarios.

La especialista subrayó que el consumo masivo sigue en caída y que este efecto generó un aumento muy leve del monto promedio de los tickets en los supermercados. “Esto refleja que los consumidores se trasladan de un local a otro en busca de ofertas y de promociones”, advirtió a LA GACETA. Estos comportamientos, sostuvo Bokser, responden no sólo al avance de la inflación, sino también a la pérdida del poder adquisitivo del salario real. “En caso de que en el corto plazo no se modifique esto, o de que la reactivación de la economía demore más de lo que esperaba el Gobierno, las conductas de consumo que se consolidaron en el primer semestre van a prolongarse durante el segundo. Los consumidores aprendieron a ser inteligentes y lo seguirán siendo mientras las condiciones económicas no se reviertan”, insistió la experta.