MILÁN, Italia.- En medio de la euforia hubo lugar para el amor. Yannick Ferreira Carrasco anotó a los 79 minutos el empate para Atlético Madrid, en la final de la Liga de Campeones ante Real Madrid. Lo curioso fue que el festejo no fue con sus compañeros sino con su mujer. El belga salió corriendo hasta el palco donde estaba su esposa y la besó apasionadamente ante la mirada de millones de personas en el mundo. Un romántico.