El ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, anunció que el juez Thomas Griesa levantó las medidas cautelares que le impedían a la Argentina pagarles a los bonistas. De esta manera, Argentina salió oficialmente del default.

Griesa confirmó el fin de las cautelares mediante un escrito minutos después de que el Gobierno nacional le informara el "pago completo" a los holdouts que habían aceptado el acuerdo oficial hasta el 29 de febrero. 

El gobierno argentino efectuó un pago de USD 9.300 millones a los holdouts y otros tenedores de bonos, para salir formalmente de la cesación de pagos.