“Es un chanta, como dicen ustedes”.
Como decimos nosotros (los argentinos) y como ya dice él, que es español, pero ha empezado a familiarizarse hace poco con los términos vernáculos. Guillermo Toledo -conocido por haber protagonizado “Crimen ferpecto”, de Álex de la Iglesia, entre otras películas- no encuentra en su léxico original mejor adjetivo que ese, el de chanta, para referirse al personaje que interpreta en “Psiconautas”, el último estreno del canal TBS. La serie se filmó durante los últimos meses de 2015, tiempo durante el cual “Willy” residió en Buenos Aires, y se emite de lunes a viernes, a las 23.30.

“Psiconautas” es una tira argentina que cuenta cómo Roberto, el personaje de Toledo, llega de España escapando de unos acreedores muy peligrosos y debe ganarse la vida desde cero. A base de engaños, por supuesto. Se hará pasar entonces por un psicólogo que ejerce la psiconaútica, “una rama austríaca del psicoanálisis no muy explorada por Freud”. Sobre la base de esa mentira, reúne al más heterogéneo grupo de pacientes: una mujer casada por interés, que desprecia a los pobres (Florencia Peña); un suboficial de la Policía, de origen judío (Gabriel Goity); una alemana que sacia sus deseos sexuales contratando chongos (Verónica Llinás); una maestra de primaria que profesa la vida sana y el respeto a la naturaleza (Julieta Zylberberg) y un joven que quiere ser poeta, pero es malísimo en el intento (Martín Piroyansky). Completa el elenco Luis Ziembrowski, el dueño del club en donde tiene lugar la terapia.

¿Qué motivó a Toledo a mudarse de país y participar en la serie? “Dos razones -le dice a LA GACETA-. La primera, el guión. Y la segunda, trabajar en Argentina, un país que adoro. Esta propuesta me llegó por una casualidad hermosa. Resulta que Lucas Vivo (uno de los guionistas) es fanático de De la Iglesia y, en concreto, de ‘Crimen ferpecto’. Escribió el personaje de Roberto pensando en mí y, afortunadamente, un colaborador suyo conocía a mi representante. Se pusieron en contacto y empezó una bonita relación”.

No sólo con los libretos empatizó al instante Toledo sino también con el humor que propone “Psiconautas”, que en las promociones de la ficción es definido como “bien argento”. “Desconozco el resto del país, pero sí puedo decir que el humor porteño es muy parecido al de Madrid. Entonces me identifico mucho con él”. El reparto de la tira también es objeto de elogio para el actor español: “hubo una conexión linda desde el primer momento. Nos hemos reído mucho y han sido muy generosos conmigo”.

De hecho, apuntó el español, lo que distingue al cine argentino es la calidad de sus intérpretes. “La manera de actuar de los argentinos me tiene absolutamente fascinado; del mundo latino son los mejores o, al menos, los que más me gustan. Hasta el que tiene tres frases en una película, el que atiende en el súper, es bueno -destacó-. Ese es un sello del cine nacional”.

Cada capítulo emitido estará disponible en el canal de YouTube de TBS.


ANÁLISIS
Un cóctel humorístico ácido y políticamente incorrecto

ALICIA FERNÁNDEZ / LA GACETA

“Gallego es el gentilicio de quienes viven en Galicia”, le corrige dos veces Coco a Roberto Rodríguez de la Huerta. “Estás seguro de que no sos argentino vos?”, le pregunta Coco a Roberto, asombrado por las dotes de viveza criolla del español recién llegado.

Precisamente, “Un argentino nacido en España” es el título del primer episodio de “Psiconautas (Nadie está a salvo)”, la serie que arrancó en TBS el lunes. Ya los títulos, con la cumbia “Pega la vuelta”, por el Grupo Sombras de fondo, preparan el ambiente “argento”.

Desde la llegada de Roberto (Willy Toledo) a la cantina de un club de barrio que regentea Coco (Luis Ziembrowski) ambos -actores y personajes- establecen la empatía imprescindible para salvarse montando una Pyme que funcionará en la cancha de básquet.

Allí De la Huerta asume el rol de terapeuta, con un discurso plagado de lugares comunes de seudoprofeta, frente a un grupo de pacientes que necesitan ser salvados.

La presentación de cada caso plantea que el absurdo del negocio se potenciará con cada uno de los personajes. De entrada impresionan por grotescos, pronto se cae en cuenta de que no lo son tanto si se reconoce que, como buenos humanos, todos cargamos alguna que otra neurosis, trauma y/o fobia.

Para ello, se armó de un elenco con suficientes referencias en comedia, con especial lucimiento de Emilce, con una Verónica Llinás a quien en 2015 se vio desgarrada en “Historia de un clan”, esta vez de vuelta al desopilante registro que cooptó “Viudas e hijos del rock and roll”. “Puma” Goity -Gorsky- es un policía judío lleno de tics. Julieta Zylberberg es sólida como feminista densa; Martín Piroyansky es Axel, un poeta imposible, y Florencia Peña (Fabiana) recurre a un personaje muy similar desde “Casados con hijos”.

Comedia costumbrista un tanto atípica, con guiños de los vínculos argentino-gallegos y locales. Una mirada a nosotros mismos y a todos aquellos que creen que van a encontrar algo o alguien que los salve. “Psiconautas” aparece como un cóctel humorístico ácido y políticamente incorrecto, cuyo atractivo combustible es la dinámica narrativa ágil, con el aditivo que provoca la risa a lo largo de los 30 minutos del episodio.