El Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner dejó una deuda de casi $3.400 millones a empresas constructoras, según un informe de diagnóstico realizado por la Secretaría de Vivienda y Hábitat de la Nación, conducida por el tucumano Domingo Amaya.

En Tucumán, esa deuda asciende a $205 millones. El documento indica que se encontraron irregularidades en gran parte de los montos que sí se abonaron. El reelvamiento indica que en 2014, la administración del ex gobernador José Alperovich recibió $1.163 millones de planes federales y Fonavi, y construyó 1.415 viviendas. Este año, con apenas $326 millones, San Luis edificó 2.892 casas.