Una mujer se sumó a la lista de sospechosos de un robo que en un principio había estado integrada por el ex candidato a concejal Mauro Godoy y su hermano mellizo, Mariano Godoy. La fiscala Adriana Giannoni investiga si alguno de ellos tuvo relación con el violento asalto que sufrió Alicia Villagrán de Miranda, el 13 de enero pasado.

Los hermanos Godoy habían sido detenidos el 29 de enero. La fiscala Giannoni pidió que se realice una rueda de personas para que la víctima reconozca al autor del robo. Como Villagrán de Miranda solamente señaló a Mauro, su hermano mellizo quedó en libertad.

Sin embargo, el ex candidato a concejal por Banda del Río Salí no sería el único sospechoso. El jueves, personal de la división Delitos Contra la Propiedad aprehendió a una mujer que también estaría vinculada al hecho. Se trata de una persona de 39 años, quien habría mantenido conversaciones telefónicas e intercambiado mensajes de texto con el supuesto autor del robo, al día siguiente del asalto. Los investigadores creen que pudo haber encubierto al delincuente.

La sospechosa fue presentada ayer en tribunales, donde Giannoni le tomó declaración. Fuentes policiales contaron que, después de escucharla, la fiscala solicitó su detención. Además, otras personas estarían bajo la lupa de los investigadores por este mismo caso.

Respecto a Godoy, su abogado defensor intenta probar su inocencia. El letrado Manuel Pedernera informó que ayer comenzaron a declarar varios testigos que acreditarían que el 13 de enero, cuando Villagrán de Miranda fue atacada en su departamento de calle San Juan al 600, Godoy se encontraba en la Municipalidad de Banda del Río Salí cobrando una partida presupuestaria correspondiente a una cooperativa de trabajo que él preside.

El caso cobró repercusión debido a la violencia con la que actuó el autor del hecho. Villagrán de Miranda fue golpeada con brutalidad en el rostro y después, para quitarle un anillo de oro, el ladrón le amputó un dedo un cuchillo de cocina. Gracias a la rápida intervención de los médicos, consiguieron volver injertarle el dedo y la mujer pasó varios días internada.