NUEVA YORK.- Victoria´s Secret celebró anoche su décimo desfile anual. Fueron 47 los modelos que pasearon por la pasarela de sala del Regiment Armory, en Manhattan y 20 las que lucieron las emblemáticas alas. A las chicas, además, las acompañaron con su música Selena Gómez, The Weeknd y Ellie Goulding (esta última en reemplazo de Rihanna que canceló en último momento). Para ver el espectáculo en la televisión, habrá que esperar hasta el 8 de diciembre.

Una vez al año, Victoria's Secret envía a sus "ángeles" a desfilar sobre la pasarela, y el sector pierde la cabeza por estas mujeres en lencería y el glamouroso espectáculo. En el fondo, se trata sólo de una marca que muestra su colección, pero al igual que Apple, Victoria's Secret ha logrado hacer de su desfile anual un acontecimiento mundial al que contribuyen celebridades, medios, espectadores y clientes. "VS" es culto. Y eso es lo mejor que le puede pasar a una marca.

Adriana Lima, Alessandra Ambrosio fueron algunas de las "veteranas" que se lucieron en la pasarela. Debutaron como ángeles la estadounidense Martha Hunt y la sueca Elsa Hosk. Otra de las modelos que acaparó gran parte de la atención fue Kendall Jenner, del clan Kardashian. Maria Borges, por su parte, se asemejaba a un ave del paraíso, con una ostentosa colección de plumas que casi rodeaba su cabeza. Con todo, la estrella del desfile fue Lily Aldridge. Y no por sus alas, sino porque la supermodelo californiana (de casi 30 años, 1,75 metros de altura y 53 kilos de peso) fue la elegida para desfilar con el "Fantasy Bra", el corpiño de fantasía de la marca.

Sobre esto vale recordar que cada año, Victoria's Secret diseña un sujetador de diamantes, cuyo valor es siempre de al menos un millón de dólares, aunque puede llegar a los 15 (como el "Red Hot Fantasy Bra" de Gisele Bündchen en el año 2000). Esta vez, el modelo era blanco y con apliques dorados. Eso sí, en los últimos 20 años, al parecer sólo se vendieron dos. El resto fueron reconvertidos. (DPA - Especial)