River salió ileso de México, sin goles en contra en la primera final de la Copa Libertadores, ante Tigres. Sin embargo, al que le quedaron secuelas por un duelo jugado con el cuchillo entre los dientes, fue al delantero del local André-Pierre Gignac.

El francés sufrió la marca de Jonatan Maidana, una de las figuras de la cancha ayer, que se paró firme en el fondo. El hombre no pudo marcar y en parte fue por que "Joni" lo apretó todo el tiempo.

Una imágen que el propio Gignac publicó lo dejó claro.