BUENOS AIRES.- El esfuerzo y la perseverancia son mucho más que cualquier traba en el camino. Así es como lo entendió la modelo australiana Madeline Stuart, de 18 años, quien a pesar de padecer Síndrome de Down y una enfermedad cardíaca está dispuesta a demostrar que puede ser tan bella y sexy como cualquier otra.

"Me gustaría ser portada en alguna revista de moda, algo que es difícil para modelos con discapacidad. Sería una forma de cambiar el mundo, quiero demostrar que la gente con Síndrome de Down es una bendición", afirmó con seguridad.

La jovencita, que vive en Brisbane, goza mucho este momento, ya que de repente por su lucha a conocido de manera repentina la fama. Ahora administra junto a su madre una página de Facebook, aunque no pierde la mirada objetiva de la realidad.

"Mientras sea algo divertido, quiero seguir como modelo. Pero cuando deje de serlo pasaré a hacer otra cosa. La vida es corta y tienes que divertirte en ella", expresó con inteligencia e ideas claras sobre el futuro.