Llevaban un día entero buscándola, sin saber que la adolescente de 14 años había estado todo ese tiempo encerrada en la casa de un vecino. Cuando lo descubrieron, llamaron a la Policía y cuatro personas terminaron aprehendidas. La víctima habría sido drogada y violada en su cautiverio.

Los familiares de la adolescente advirtieron su ausencia el martes a la noche. Según comentaron, la habían visto por última vez en la vereda de su casa, ubicada en una zona de Los Pocitos conocida como el “pasaje de La Muerte”. Su padre y sus hermanos pasaron toda la noche buscándola. A la mañana siguiente, el hombre se presentó en la comisaría y denunció la desaparición.

La preocupación aumentaba con las horas. Alrededor de las 17 del miércoles comenzó a circular el rumor de que la chica estaba encerrada en una vivienda contigua a la suya. Varios policías se acercaron al lugar y entraron a la casa, pero no la encontraron y se retiraron, según indicaron fuentes policiales.

Sin embargo, el rumor fue creciendo y un vecino aseguró haber visto a la adolescente dentro de esa vivienda, pasadas las 22. “Entré y la saqué hasta la puerta, para que la vea la Policía”, contó Héctor, el hermano de la víctima. Minutos después llegó un patrullero y trasladaron a la adolescente y a los presuntos captores a la comisaría.

No recordaba nada

Fueron pocas las palabras que pudo intercambiar Héctor con su hermana, antes de que llegara la Policía. “Me dijo que no se acordaba de nada, que cuando se despertó a la mañana estaba en la cama con el viejo (dueño de casa) y un sobrino de él”, relató el joven. Después la encerraron en un baúl y la mantuvieron todo el día cautiva, sin darle de comer, según agregó el muchacho.

Héctor aseguró que su hermana fue drogada con gaseosa mezclada con pastillas y que le vio marcas de golpes en los brazos y en el cuello. También dijo que la chica vestía una ropa diferente a la que llevaba cuando desapareció. De acuerdo con su testimonio, mientras esperaban a la Policía, salieron las dos hijas de su vecino y amenazaron a la adolescente para que no contara nada de lo que había pasado. Mientras los vecinos aportaban sus testimonios a este diario, una mujer se acercó ansiosa por contar su experiencia.

Antonia aseguró que su hija de 14 años sufrió un ataque similar hace aproximadamente un mes. “También soy una víctima de esta gente; a mi hija la llevaron a un asentamiento para que sea acompañante y le dieron un jugo con droga”, afirmó la mujer. No obstante, Antonia no realizó la denuncia policial.

Pericias

Por orden del fiscal de Instrucción de la X° Nominación, Guillermo Herrera, quedaron aprehendidas cuatro personas. Se trata del dueño de casa, un hombre de 56 años, su esposa de 54 y las dos hijas del matrimonio, de 20 y 21 años. Respecto al sobrino del supuesto agresor, quien habría abusado de la adolescente, ya se había ido de la casa cuando llegaron los policías.

El miércoles a la noche, los uniformados evitaron que los familiares y vecinos de la víctima lincharan al presunto captor. Después, la turba enardecida ingresó a la vivienda y destrozó todo lo que encontró a su paso.

La adolescente, mientras tanto, se encontraba ayer en un centro de salud. Por orden judicial, recibió asistencia médica y le realizaron todos los exámenes correspondientes para determinar cuál era su estado de salud y qué tipo de agresiones había sufrido.