Tenían el arco libre para hacer un gol y terminaron tirando la pelota a la tribuna. Así, con lenguaje futbolero, interpretaron los concejales de la capital el intento frustrado de los ediles amayistas de imponer el proyecto de reordenamiento del estacionamiento callejero, pese a que contaban con el aval de sus pares alperovichistas y opositores.

Ocurre que, a raíz de un sinnúmero de errores existentes en los pliegos para la explotación del sistema de parking en varias calles de la ciudad -el yerro fue advertido minutos antes de la sesión-, la iniciativa amayista tuvo que ser enviada a las comisiones de Peticiones y Poderes, de Tránsito y de Hacienda para ser corregida. Y cuando esto suceda, recién estará en condiciones de retornar al recinto para su tratamiento definitivo.

Si bien el proyecto ya había sido modificado a instancias de un pedido de la oposición, la redacción del pliego presentaba varios errores de tipeo y, además, se habían utilizado palabras que modificaban sustancialmente el espíritu de la iniciativa.

Apenas empezó la sesión, el amayista José Franco fue el encargado de advertir a sus pares sobre la inconveniencia de aprobar una iniciativa plagada de inconsistencias. “Hace dos meses la comisión de Tránsito viene trabajando para debatir en el recinto esta problemática. Pero surgieron una serie de factores que hacen que tengamos que seguir estudiando el proyecto para dejar conformes a todos los actores involucrados en este reordenamiento del sistema de estacionamiento pago. Por eso, es mejor que vuelva a comisión”, planteó Franco.

Al igual que sus pares opositores, el radical José Luis Avignone ponderó la decisión del amayismo de solicitar el envío a comisión del proyecto de ordenanza que giró el intendente, Domingo Amaya, hace dos meses. “Celebro que el bloque peronista haya tomado esa decisión. Han escuchado las voces encontradas y han considerado prudente realizar un mayor estudio. En buena hora que se haya dado el paso atrás”, expresó Avignone.

Luego, el amayista Christian Rodríguez retrucó: “nuestro espíritu siempre fue que se hagan bien las cosas. Incorporamos algunas modificaciones para mejorar el servicio. Vamos a corregir las cuestiones técnicas y jurídicas que hagan falta”.

A su vez, la opositora Sandra Manzone (Coalición Cívica) observó en el pliego de bases y condiciones que el Departamento Ejecutivo tendría un exceso de facultades por sobre el concesionario del servicio. En igual sentido se pronunció el macrista Roberto Ávila, quien dijo que la Dirección de Tránsito contará con facultades desmesuradas. “El actual pliego dice que la autoridad de aplicación tendrá potestad para ampliar o reducir el número de calles concesionadas. Por eso me alegro que el proyecto regrese a comisión”, señaló el representante del PRO.