BUENOS AIRES.- El secretario de Seguridad, Sergio Berni, justificó ayer su pedido de que sean deportados los ladrones extranjeros, al destacar que en la Argentina hay “una ley clara que prevé la expulsión” de estas personas que delinquen, por lo cual insistió en la necesidad de abrir un debate para que esta norma “alguna vez funcione”.

Aclaró, sin embargo, que “nadie atribuye el problema de la delincuencia a la ‘extranjería’, ya que los problemas complejos de los delitos es la sumatoria de muchas situaciones”.

El funcionario ratificó su postura luego de la polémica generada cuando el martes último, tras un asalto y tiroteo en un supermercado del barrio porteño de Balvanera, protagonizado por cinco delincuentes chilenos, Berni pidió la deportación y reclamó a los legisladores un cambio en las normas vigentes para evitar “caer en saco roto”.

Berni aseveró: “tenemos un problema que lo podemos solucionar, la ley prevé las herramientas para solucionarlo, pero básicamente es imposible su cumplimiento”.

Berni, por otro lado, justificó su pedido al destacar que en la Argentina hay “una ley clara que prevé la expulsión” de estas personas que delinquen, por lo cual insistió en la necesidad de abrir un debate para que esta norma “alguna vez funcione”.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, avaló ayer las declaraciones de Berni, al sostener que “no fueron xenófobas, ni discriminatorias”, sino que “tiene que ver con el estado de derecho” el contemplar la deportación de un (ciudadano) extranjero que comete un delito en el país.

En su habitual rueda de prensa en la Casa Rosada, el ministro coordinador expresó que “generar los mecanismos de deportación es una cuestión que debe ser analizada en el ámbito del Poder Judicial y, si es necesario, en el ámbito del Congreso para facilitar la ejecución de las sentencias”.

“Lo que ha dicho el secretario es que en muchos casos, viene determinado tipo de ciudadanos, que no registra antecedentes, que no está debidamente ponderado; ingresa a la Argentina y promueve acciones delictivas”, señaló Capitanich.

Al respecto, prosiguió que “lo que corresponde, cuando son ciudadanos extranjeros que cometen delitos, lograda la detención correspondiente, con la orden judicial respectiva, es establecer la deportación de los mismos” pero aclaró: “Esto tiene que ver con la plena vigencia del estado de derecho”.

Expulsiones

El gobernador bonaerense, Daniel Scioli afirmó que “no es una cuestión de xenofobia ni de discriminación” sino “sentido común” el pedido del secretario de Seguridad nacional de aplicar una ley para deportar a extranjeros que cometan delitos.

Berni “lo ha dicho desde el sentido común”, aseguró Scioli, y agregó que “si un extranjero viene acá a cometer un delito, evidentemente no viene con la vocación de inmigrante de colaborar y hacer grande una Provincia y la Argentina”.

En este sentido, afirmó que plantear este tipo de iniciativa “no es una cuestión de xenofobia ni de discriminación, es tratar al delito como tal”.

A través de un comunicado, el gobernador advirtió que “se desdibuja ese espíritu de inmigrante” al cometer un ilícito.

No es descabellado

La jefa del bloque kirchnerista de la Cámara de Diputados, Juliana Di Tullio, admitió que el reclamo del secretario de Seguridad, para que extranjeros que cometan delitos en el país sean deportados le generó “contradicciones”, aunque le pareció “lógico” el pedido.

Sin embargo, en diálogo con radio América, Di Tullio evitó manifestar su posición al respecto, al advertir que aún “no” tiene “saldado” el debate. “Lo puedo pensar en términos de sentido común y no me parece descabellado”, sostuvo la legisladora, a la vez que aseguró que la problemática debe debatirse “en el Congreso”. Di Tullio insistió con que el reclamo le genera “contradicciones” y agregó: “Me parece lógico que (Berni) lo pida y me parece lógico que se genere el debate, pero eso no significa que lo tenga saldado”. (DyN)