BUENOS AIRES.- El 41 Congreso Nacional Bancario decidió hoy un paro general para el 8 de julio próximo en las entidades públicas y privadas y durante todo el horario de atención al público en demanda de "la inmediata reincorporación de los 36 trabajadores despedidos en la Caja Popular de Ahorros de Tucumán y la derogación del impuesto a las ganancias salarial".

El titular de la Asociación Bancaria (AB), Sergio Palazzo, anunció la protesta del 8 de julio, decidida por unanimidad y, de forma previa, el personal realizará asambleas sorpresivas, con interrupción de tareas, entre el 2 y el 7 de julio, afirmaron Palazzo y el secretario nacional de Prensa, Eduardo Berrozpe. Palazzo clausuró hoy el Congreso Nacional Bancario en la sede sindical de Sarmiento al 300, que deliberó durante tres días y ratificó "la continuidad y profundización del plan de lucha".

El paro nacional del 8 de julio se realizará con concurrencia a los lugares de empleo y sin atención al público toda la jornada. Los congresales repudiaron el fallo de la Corte Suprema estadounidense por coincidir con "los intereses de los fondos buitre", ratificaron "la necesidad de producir las reformas financiera y tributaria" y reclamaron "la reincorporación de los 36 despedidos en Tucumán y la derogación de ganancias sobre los ingresos salariales, que tienen carácter alimentario".

"Los bancarios repudian la vergonzosa negativa de la Corte de Estados Unidos a revisar el fallo del juez Thomas Griesa, que vulnera la soberaní­a argentina y pone en zozobra futuras restructuraciones de deudas de otras naciones", señaló la "Declaración Final", leída por el dirigente Andrés Castillo.

Los congresales reclamaron una ley de servicios financieros que abarque a todos los sectores de la actividad y ubique a sus segmentos bajo la supervisión del Central, revisando la normativa de esa entidad con la participación de la Bancaria. (Télam).