ISLA DE CEBÚ, Filipinas.- Una organización que filmaba y transmitía en vivo abusos sexuales a menores fue desbaratada gracias a un operativo policial internacional que logró dar con los responsables y dejar al descubierto su accionar.

Gilbert Sosa, superintendente de la Policía filipina, consideró que la pederastia “se ha convertido en un gran problema en el país, e incluso en algunos casos están implicados los padres”.

El funcionario explicó además, en declaraciones que refleja el sitio “Actualidad”, que la pobreza extrema lleva a algunos menores a prostituirse o a trabajar en los llamados antros de cibersexo, lugares, donde los menores son forzados a realizar prácticas sexuales delante de cámara web que transmite las imágenes para los clientes pederastas, algo que Sosa calificó como “un negocio en expansión” en la isla.