ROSARIO.- Le demostró lealtad a su amo hasta el último minuto de su vida. Collie, un conocido perro del cementerio rosarino La Piedad, murió luego de haber vivido nueve años junto a la tumba de quien era su dueño. El animal llegó el día que sepultaron a quien cuidaba de él, pero el paso del tiempo y el hecho de vivir deambulando le deterioraron la salud y fue internado en una veterinaria, donde falleció este martes.

El animal fue hallado en el cementerio aullando de dolor por un grupo de proteccionistas, por lo que contactaron a un veterinario, Federico Bonino, quien lo revisó el lunes y decidió internarlo. El perro estaba en muy mal estado y deshidratado. Al llevarlo a la clínica el profesional detectó que tenía una insuficiencia renal grave, informó el diario "La Capital".

A pesar de los cuidados, Collie tuvo dos convulsiones el lunes y falleció al día siguiente. "Al menos pudimos hidratarlo y compensarlo, por lo que tuvo una muerte con dignidad", dijo dolido el veterinario.

Su historia

Collie llegó el día que enterraron a su amo, nueve años atrás. Esa noche se quedó junto a la tumba y al día siguiente, cuando los familiares fueron por él, no hubo forma de llevarlo. Y cuando puedieron llevárselo con sogas, el animal siempre volvía. Estiman que el animal tenía entre 12 y 14 años y, debido a su gran lealtad, referentes del cementerio analizaban retirarlo de la veterinaria para llevarlo al mismo lugar donde vivió en los últimos tiempos.