BUENOS AIRES.- Al partido le quedaban pocos segundos cuando Sebastián Torrico, el arquero de San Lorenzo, se vistió de héroe. Agustín Allione, de Vélez, había pescado un rebote en el área y con un derechazo casi al centro del arco pareció sentenciar el campeonato. Pero bajo los tres palos, el "Cóndor" se quedó con la atajada más importante de su carrera, la que le alcanzó al "Ciclón" para asegurarse el Torneo Inicial. Apenas con la mano derecha, el mendocino logró despejar el bombazo y el alma le volvió al cuerpo a los hinchas de San Lorenzo, que todavía festejan el empate consagratorio.