El gobernador, José Alperovich, cuestionó a la Policía por haber desatado una represión contra manifestantes en la noche del martes, en plaza Independencia, pero denunció que entre estos se colaron infiltrados políticos. Formuló estas declaraciones durante una breve conferencia de prensa que concedió hacia el mediodía de ayer, en la Casa de Gobierno. “(Estuvo) muy mal. El pueblo tiene el derecho a expresar su disgusto, a manifestarse. La Policía debería haber aguantado, no tendría que haber reprimido. La gente tiene toda la libertad del mundo para expresarse, porque vivimos en democracia”, manifestó el mandatario.

Sugirió, sin embargo, que no toda la gente había ido por cuenta propia: “siempre hay infiltrados políticos; había gente de La Bancaria, que destruyó autos, de (la agrupación radical) Boinas Blancas, de (José) Cano. Pero la gente tiene derecho a golpear la cacerola, a expresarse; y nosotros tenemos la obligación de entenderla”.

Alperovich arremetió, también, contra los que policías que se acuartelaron. “(Estamos) con mucha pena, con mucha bronca. No hay perdón de Dios para lo que han hecho. (Estamos) tratando de que se normalice todo, poniéndonos al frente. Pobre gente; no le encuentro sentido a esta extorsión de la Policía, que hizo pagar semejante costo a la sociedad, no tienen perdón de Dios”, afirmó. También cargó contra los que realizaron los saqueos. “Di instrucciones al fiscal de Estado, para que eleve las denuncias penales que deba hacer. Tienen que ir presos. Me angustia que salgan así a robar; que la sociedad deba salir por sus propios medios a defenderse; me parece una injusticia total. Pero hay que seguir trabajando”, señaló.

Cruces

A Alperovich salieron a responderle desde los tres sectores que acusó de llevar infiltrados. “Otra vez inventa falsas acusaciones para tapar su ineptitud. Todo el país vio cómo la Policía atacó a los ciudadanos que se expresaban libremente y que les reclamaban por el abandono de sus servicios. Tiene que hacerse cargo de su fracaso”, bramó el diputado nacional.

Cano reclamó a Alperovich que despida al ministro y al secretario de Seguridad, Jorge Gassenbauer y Paul Hofer, respectivamente. “En lugar de andar buscando culpables donde nos los hay, debe asumir que sus funcionarios fueron ineptos para prever la crisis. Es un mentiroso al que se le acabó el falso relato y la posibilidad de gobernar con la billetera llena”, afirmó.

También salió a responderle el legislador radical Ariel García, referente de la agrupación Boinas Blancas. “Alperovich sostiene que los policías debían haberse aguantado de reprimir, como si estos se mandaran solos. En vez de buscar chivos expiatorios a la incapacidad para resolver el tema de la seguridad, tendría que realizar cambios en su Gobierno para que no sean los tucumanos los que deban procurarse la seguridad por sus propios medios”, puntualizó.

El secretario general de La Bancaria, Eduardo Bourlé, se anotó en las contestaciones. “Es fácil echarle la culpa a La Bancaria o a algún sector político. Trabajadores bancarios pueden o no haber participado de la movilización; pero en caso de que hubieran estado allí era para manifestarse en contra de la inseguridad. El único que tiene garantizada la seguridad en Tucumán es él. ¡Qué casualidad que sus empresas no sufrieron saqueos”, criticó. Y añadió: “la gente se encuentra molesta y asustada, porque el Estado no estuvo presente”.