CALIFORNIA, Estados Unidos.- Era una de las grandes apuestas de Samsung para 2013, y se está convirtiendo en uno de los grandes fracasos para el mercado de los dispositivos tecnológicos. 

El reloj inteligente Galaxy Gear no tuvo un buen desempeño en sus primeros meses en el mercado, y el 30% de los compradores ha optado por devolver el producto. Esto se desprende de un informe publicado por el sitio web “Geek”, especializado en tecnología.

Las características técnicas del dispositivo eran bastante prometedoras. Cuenta con un procesador de 800 MHz, y 512 MB de RAM, funciona conectado con un smartphone vía Bluetooth y ofrece una multiplicidad interesante de herramientas y funciones.

Pese a todo esto, los 299 euros que cuesta parece ser demasiado. De otra forma, resulta difícil de explicar la alta tasa de retornos que se han registrado en las tiendas norteamericanas.