El expresidente sudafricano Nelson Mandela, de 95 años, abandonó esta mañana la clínica de Pretoria donde estuvo internado cerca de tres meses, aunque su estado sigue siendo "crítico" y a veces "inestable", anunció la presidencia de ese país a través de un comunicado.

Un convoy de 14 automóviles y dos ambulancias llevó a Johannesburgo a Mandela y al mismo personal médico que le había sido asignado en Pretoria.

Su casa "ha sido reacondicionada para permitir que reciba tratamiento intensivo" y "su equipo de doctores está convencido de que recibirá el mismo tratamiento en su casa en Houghton que en (el hospital) de Pretoria", señala la presidencia.

La presidencia reconoció también por primera vez que el ex presidente sufre complicaciones múltiples y no solo un problema pulmonar, pero indicó que "a pesar de las dificultades causadas por sus problemas de salud, él [Mandela] siempre ha mostrado inmensa dignidad y fortaleza".

Desde que Mandela fue hospitalizado, los sudafricanos se han unido en la oración por la pronta recuperación del primer presidente negro del país. También líderes mundiales y políticos locales mandaron también mensajes de apoyo durante el largo período en el que estuvo internado en Pretoria. (Télam)