El estatuto de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) no se reformará durante el presente mandato, de manera que las máximas autoridades de la casa de altos estudios -rector, vicerector, decanos y vicedecanos- no podrán acceder a una segunda reelección. Así lo decidió hace minutos el Consejo Superior, cuyos miembros decidieron transformar en resolución del cuerpo una declaración del Consejo de Decanos, firmada por las conducciones de las 13 unidades académicas, por el rector, Juan Alberto Cerisola, y por la vicerrectora, Alicia Bardón.
 
"Resulta innegable que el estatuto adolece de vacíos y de disposiciones que afectan a los cuatro estamentos. No obstante, no se entiende prudente llevar a cabo la reforma en los pocos meses que faltan para el recambio de autoridades (...). Una tarea de tal envergadura debería emprenderse a partir y como objetivo esencial de las próximas autoridades", dice el texto firmado por los 13 decanos, por Cerisola y por Bardón.
 
Por otro lado, los consejeros superiores Martín Rivas, Luis Fernando Pérez Vides, María Celeste Caselles (de Franja Morada, mayoría estudiantil), Víctor Amaya (Nueva Línea, segunda minoría estudiantil); Luis Rafael Antolini y Osvaldo Pirchi (docentes auxiliares) y Luis Calderó (profesores titulares) habían presentado una nota, en el mismo sentido, que agregaba una resolución:
 
1.- Declarar inoportuno la convocatoria a la Asamblea hasta el vencimiento de los actuales para discutir la reforma del estatuto.
 
2.- Sugerir a las nuevas autoridades electas en mayo de 2014 el inmediato advocamiento a estudio y posterior convocatoria a la Asamblea.
 
Aunque en general casi todo el cuerpo coincidía en el espíritu de ambas notas surgió un debate: un sector pretendía que el Consejo simplemente tome conocimiento de la declaración de los decanos, del rector y de la vicerrectora, mientras que otro grupo proponía que el máximo órgano deliberativo de Gobierno de la UNT transforme en resolución el mencionado documento.
 
Finalmente, se decidió: resolver que con Consejo ratifica lo decidido por el Consejo de Decanos, el rector y la vicerrectora, que el cuerpo adhiere y hace propio todo el texto.
 
El consejero por el estamento no docente, Ángel Morales, se abstuvo, sobre la base de que su sector considera urgente la reforma del estatuto: "necesitamos la participación plena; el 50% de los compañeros no docentes no elige ni decano ni rector; planteamos que se empiece a discutir".
 
La mayor implicancia de esta decisión tiene que ver con que las autoridades ejecutivas -rector, vicerrector, decanos y vicedecanos- no podrán acceder a una segunda reelección, porque la posibilidad de una "re-re" estaba atada a una reforma del estatuto.
 
Fuera Cerisola de la carrera por el Rectorado en se abre la discusión por la sucesión.