BUENOS AIRES.- El ex presidente de facto Jorge Rafael Videla murió esta mañana a los 87 años en la ciudad de Buenos Aires. Cumplía una condena de prisión perpetua por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar, acusado de torturas y asesinatos.

El fallecimiento fue confirmado por Cecilia Pando, esposa de un militar, a la radio Once Diez, de Buenos Aires. "Videla murió durmiendo. Anoche no quiso cenar porque se sentía mal", informó. Porteriormente se informó de manera oficial que falleció a las 8.30, por causas naturales.

Encabezó la Junta Militar que comandó el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 que destituyó a la entonces presidenta María Estela Martínez de Perón. Instauró una sangrienta dictadura que según estimaciones de los organismos de derechos humanos dejó un saldo de 30.000 desaparecidos.

Tras la recuperación de la democracia en 1983, fue juzgado y condenado en 1985 a prisión perpetua y destitución del grado militar por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura en el emblemático juicio a las Juntas.

La Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal lo halló penalmente responsable de numerosos homicidios calificados, 504 privaciones ilegales de la libertad calificada, aplicaciones de tormentos, robos agravados, falsedades ideológicas de documento público, usurpaciones, reducciones a servidumbre, extorsión, secuestros extorsivos, supresión de documento, sustracciones de menores, y tormentos seguidos de muerte.

Si bien el fallo fue confirmado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación en 1986, Videla cumplió sólo cinco años de prisión efectiva ya que en 1990, el entonces presidente Carlos Menem lo indultó y dictó su excarcelación, indicó la agencia Télam.

En 1998 regresó a prisión, aunque brevemente, luego de que un juez dictaminara que las causas por robo de bebés a embarazadas en cautiverio ilegal en centros clandestinos de detención constituían un crimen de lesa humanidad, y por lo tanto imprescriptible. Videla estuvo detenido 38 días en la cárcel de Caseros hasta que se le concedió el derecho al arresto domiciliario en atención a su edad.

Diez años después, y con la decisión del gobierno nacional de promover los juicios por delitos de lesa humanidad, Videla perdió el beneficio de la detención domiciliaria y fue trasladado a la cárcel que funciona en Campo de Mayo. En 2010 fue juzgado en la provincia de Córdoba y el 22 de diciembre el Tribunal Oral Federal 1 lo sentenció a prisión perpetua a cumplirse en una cárcel común junto a Luciano Benjamín Menéndez.

Luego en 2012, el 5 de julio en un histórico juicio, se lo sentenció a cincuenta años de prisión luego de que el tribunal que lo juzgó lo encontrara culpable por el delito de secuestro y sustracción de identidad a menores, causa conocida como "robo de bebés". LA GACETA