CIUDAD DEL VATICANO.- El nuevo Papa Francisco rezó esta mañana en una capilla de la basílica de Santa María Maggiore (Santa María la Mayor), una de las cuatro grandes iglesias de Roma, y una de las más antiguas, horas después de haber sido elegido como primer pontífice latinoamericano y primer jesuita de la historia.

Decenas de personas, entre ellas muchos fotógrafos, esperaban al nuevo jefe de la Iglesia Católica, quien apareció por primera vez en público desde su breve alocución con la que se había dirigido en la noche del miércoles a los creyentes desde el balcón de la Basílica de San Pedro. "Sean misericordiosos", fue el breve mensaje que dio a los presentes.

Durante esta visita, que tenía el objetivo de hacer un rezo en privado ante el altar de la Virgen, Jorge Bergoglio fue acompañado  entre otros, por Georg Gänswein, el prefecto de la Casa Pontificia.

El pontífice entró en la céntrica Basílica romana, muy vinculada con España, por una entrada lateral y llegó al templo a bordo de uno de los dos autos oficiales que componían el cortejo papal, precedido por una escolta de motoristas del cuerpo de Policía italiano.

Hoy, el nuevo papa oficiará además su primera misa como pontífice en la Capilla Sixtina, con todos los cardenales, a las 17 (13 de la Argentina).

El jesuita , de 76 años, pasó su primera noche como papa en la suite 201 de la residencia vaticana Santa Martha, especialmente instalada para él. Esta tarde recibirá en la Capilla Sixtina a todos los cardenales reunidos en Roma, entre ellos los 115 purpurados que participaron en el cónclave para elegir al nuevo papa.

El pontífice tiene previsto rezar el domingo ante los creyentes en la Plaza de San Pedro el tradicional Ángelus. Su pontificado comenzará oficialmente el martes 19 de marzo con una misa en la Basílica de San Pedro, a la que asistirán varios jefes de Estado y otros líderes. DPA-EFE