Una hora antes del homicidio de Damián Ricardo Roldán (78), otro ciudadano de Aguilares sufrió el ataque de un grupo de delincuentes que, como no pudieron entrar, le prendieron fuego a su casa.

Ocurrió en la localidad de El Rodeito, donde vive el agricultor Felipe Díaz (65) junto a su esposa. Ayer a la madrugada, el matrimonio se despertó con una seguidilla de disparos en la puerta de entrada. "Hicieron varios tiros y después me rompieron dos ventanas con palos", contó el hombre a LA GACETA.

Todos sus vecinos ya habían sido asaltados en alguna oportunidad -según dijo- por eso decidió hacerles frente. "A esta me la veía venir y yo no los iba a dejar entrar", afirmó.

Dispuesto a defender su casa, Díaz tomó un arma y respondió el ataque desde adentro. De esa manera impidió que los ladrones ingresaran a la vivienda. Sin embargo, no pudo evitar que los individuos hicieran de las suyas.

"Antes de irse, le prendieron fuego a mi casa. La pérdida fue total", aseguró el hombre. Y relató que él y su esposa consiguieron salir a tiempo, antes de que los alcanzaran las llamas.

Ayer, Díaz y su esposa se mudaron a la casa de un pariente, después de haber perdido todas sus pertenencias. El hermano del hombre, en tanto, intentaba identificar a los intrusos. Por la tarde se acercó a la casa de Roldán para hablar con la viuda y con la Policía. Está convencido de que se trata de los mismos delincuentes que, una hora después, asesinaron al jubilado.