Anoche se puso en marcha una nueva edición del aquadance en "Bailando por un sueño 2012", con una actuación sobresaliente de Florencia Peña, en el programa que conduce Marcelo Tinelli, en El Trece.
La presentación espectacular estuvo a cargo de Flavio Mendoza y el elenco de Stravaganza. El cuadro, especialmente preparado por la coreógrafa Romina Propatto, contó con la participación del deportista olímpico Federico Molinari (anillas) y Gisela Bernal, con seis meses de embarazo.
Cuatro piletas acrílicas con forma esférica y capacidad para 2.000 litros cada una fueron el marco propicio para el show. Se tuvo en cuenta, además, un sistema para reciclar el 100% del agua utilizada desde los ensayos. La misma se mantiene para cada gala a 32° a través de cuatro calderas. Para la coreografía del lanzamiento, se utilizaron 60 picos de aguas danzantes, cuatro efectos de espuma y una cascada de siete metros de altura y seis metros de frente, desde la cual cayeron 4.000 litros por segundo, informó el sitio de noticias del espectáculo Exitoina.com
Se lució Florencia
La actriz Florencia Peña fue la primera en probar el agua y con su habitual buen humor bromeó: "después de la presentación sólo me queda hacer palmas". Junto con Nicolás Scillama realizaron una coreografía inspirada en "My inmortal" (Evanescense). Peña festejó el primer 10 de Carmen Barbieri con sus hijos y sonrió pícara cuando Tinelli le preguntó si se había reconciliado con su ex marido.
Flavio Mendoza, Moria Casán, Aníbal Pachano y Antonio Gasalla también le pusieron un 10 al cuadro, por lo que Florencia cerró una velada impecable.
Magui Brieva y Jorge Moliniers fueron la segunda pareja en bailar. Recibieron puntajes altos de la mayoría de los jurados, menos de Polino, quien afirmó que estaba decepcionado. Más tarde, llegó al estudio la modelo María Vázquez, quien recibió el apoyo de su marido Adolfito Cambiasso y de su hijo. La participante demostró que no solo es una cara bonita, sino que también tiene aptitud para la danza acuática. El jurado les puso 48 puntos, el segundo puntaje más alto de este ritmo. LA GACETA ©