Hemos sobrevivido para ver la ficción que logró destronar a ShowMatch. Y todavía la audiencia y la prensa se siguen sorprendiendo. Todos, menos Daniel Hendler -uno de los protagonistas de "Graduados", la serie de la hazaña-, quien habla de ese logro con mucho recato. "No doy por cerrado ningún éxito porque estamos en la mitad del proceso y entiendo que si perdemos la seriedad en el trabajo mereceríamos que la audiencia se vaya a ver otra cosa", apuntó, moderado.

En un entrevista que concedió a la agencia Télam, el actor reconoció que "Graduados" lo ayudó a derribar prejuicios que hasta hace poco tenía acerca de la televisión y a comprender que ningún medio es del todo puro. "Cuando empecé a estudiar teatro creía que, a diferencia del cine, la televisión era mala palabra. Pero cuando comencé a trabajar entendí que no existen los blancos y negros, que ni la tele es toda mala ni el cine es todo bueno, y que lo importante son los desafíos que uno se impone", reconoció.

Luego reflexionó: "es cierto que la televisión es un mundo que maneja un caudal importante de negocios, por lo que una gran responsabilidad recae en cargos que no tienen como prioridad la recreación, la educación y la discusión de valores, sino el funcionamiento de una empresa. Pero uno entra en el medio y debe llevar su oficio con la mayor dignidad posible".

Aún con esta premisa y con los temores despejados, la popularidad de la tira parece ser mucho mayor de la que Hendler -reconocido actor fetiche del director de cine Daniel Burman, con el que hizo películas como "Esperando al Mesías" y "Derecho de familia"- estaba acostumbrado a manejar. Por eso, evidentemente agobiado por todas las repercusiones del ciclo, admitió que está en pleno proceso de adaptación a la fama repentina, aunque siempre prefiere seguir rehuyendo del exitismo.

Supervivencia
En la tira, Hendler interpreta a Andrés Goddzer, un parsimonioso paseador de perros de 38 años que vive con sus padres y se resiste al paso del tiempo. Su vida, devenida en una copia fiel de sus años de secundaria, cambia radicalmente con la aparición de un hijo (Gastón Soffritti), producto de un encuentro ocasional que tuvo con Loli Falsini (Nancy Dupláa) en la fiesta de graduación. Con un promedio de 23 puntos de rating, la ficción completa su elenco con Luciano Cáceres,Roberto Carnaghi, Mirtha Busnelli, Juan Leyrado, Julieta Ortega y Mex Urtizberea, entre otros.

"Todos los personajes tienen sus contradicciones, pelean por lo suyo e, incluso, las zonas más grotescas que toca cada uno de los papeles tienen detrás una verdad", interpretó el uruguayo. Él atribuye el masivo respaldo del público precisamente a la riqueza de las personalidades. Acerca de lo imbatible que se ha vuelto "Graduados" frente a Marcelo Tinelli, añadió que era un prejuicio pensar que una ficción familiar no podría seducir tanto a los televidentes como el certamen de baile.

"Si bien es cierto que cuerpos desnudos, armas o quilombos atraen a la gente, no quiere decir que lo demás no atraiga y que el público no agradezca que se haya apostado a un programa que no apele a esas fórmulas", sopesó el actor de 36 años, ganador de un Oso de Plata en el Festival de Berlín por su trabajo en el filme "El abrazo partido". "Lo que está claro -refrendó- es que hay cosas que siempre funcionan, y todo lo demás depende de la química y de cómo estén hechas. En este caso, apostaron a cosas que tenían un golpe menos inmediato, pero que funcionan y tienen esa química".

Hasta este año, las experiencias de Hendler en la pantalla chica habían sido en calidad de invitado, aunque tuvo un papel en 2008 dentro del reparto coral de la comedia "Aquí no hay quien viva" (también emitida por Telefe). Hoy, con el tiempo delimitado por las exigencias de una tira diaria, pero con un año catapultado por el estreno de su primer película como director -"Norberto apenas tarde"-, Hendler promete volver a apostar por el cine rioplatense.

"Estoy escribiendo algo, que de momento está interrumpido. Cuando laburé en 'Aquí no hay quién viva' tenía tiempo en el camarín para escribir y me había hecho la idea de que acá iba a pasar lo mismo, pero no hay posibilidad -explicó-. Lo único que puedo adelantar es que se llamará 'El Palomar' y es una mezcla de comedia y thriller político. Por ahora, si tengo un momento libre, lo dedico a actividades de absoluta supervivencia como dormir, comer o hablar por teléfono".