Que sorprenda es bastante. Pero hay más en el segundo trabajo del cuarteto stoned tucumano. Además de la calidad técnica, la pureza del sonido, la muy buena grabación y edición, y la ejecución, esta vez la banda optó por mostrar su faceta cancionera, con el acento puesto en el amor y el desencuentro. Pero también varía en ritmos y estilos, con baladas que se plantan ante la potencia ya conocida pecadora. Impacta también el tema "Barro soy", con la interpretación de Priscila Omil.