Aunque las lloviznas caídas durante la noche sobre los Valles Calchaquíes no agudizaron el estado de la ruta 307, la situación no cambió en las últimas horas. Sin embargo, a partir de las 10.30 se levantaron las restricciones para los vehículos de gran porte. De esta forma, camiones y colectivos comenzaron a subir hacia Tafí del Valle y El Mollar.
Hasta el momento, se desconoce con certeza cuándo las autoridades de Vialidad decidirán mover la enorme piedra que dificulta el paso por el kilómetro 40 del camino. La roca, de casi 8 metros de ancho por 5 de alto, se desprendió de la montaña ayer y se encuentra sobre una curva agregando aún más complicaciones al recorrido. LA GACETA ©