INVERCARGILL (Tomás Gray, enviado especial).- Es la ciudad más austral de Nueva Zelanda. Algo así como Ushuaia, aunque está un poquito más arriba. Aquí, Los Pumas jugarán contra Rumania, que llega con el antecedente de haber hecho sufrir a Escocia y pretende dar el golpe. El entrenador argentino Santiago Phelan lo sabe y, por eso, decidió mantener casi el mismo equipo que enfrentó a Inglaterra. Sólo saldrán los lesionados, entre ellos el tucumano Julio Farías Cabello, que dejará su puesto a Alejandro Campos debido a una fatiga en los isquiotibiales. El plantel realizó ayer el reconocimiento del campo de juego del Rugby Park.

La mayor novedad fue la llegada de Lucas Borges. "Las condiciones climáticas van a emparejar el partido. Con viento y posiblemente lluvia será difícil imponer un juego de pases", destacó. La ubicación de Santiago Fernández es la otra novedad: será el apertura en lugar de Felipe Contepomi. Por su parte, Martín Rodríguez Gurruchaga, será otra vez el encargado de patear a los palos. "Espero que el partido no se tenga que definir con una patada. Uno en ese caso es héroe o villano", señaló.