MONTECARLO, Mónaco.- Tras una larga soltería, salpicada  por amoríos y escándalos, el príncipe Alberto II de Mónaco, de 53  años, se decidió por fin a decir "sí quiero" y se casó hoy en ceremonia religiosa con la sudafricana Charlene Wittstock, con quien ayer contrajo matrimonio civil.