La Selección Argentina Sub 20 afrontará una verdadera prueba de fuego cuando hoy enfrente a Nigeria, desde las 16.30 en el Estadio Nacional Julio Martínez Prádanos de Santiago de Chile, por los octavos de final del Mundial Sub 20 2025. Después de una primera fase perfecta, la “Albiceleste” se medirá ante un rival con historia y antecedentes cruzados en esta categoría.

El equipo dirigido por Diego Placente llega a esta instancia con puntaje ideal y una imagen sólida. Durante la fase de grupos, Argentina superó a Cuba (3-1), Australia (4-1) e Italia (1-0), resultados que le permitieron adueñarse del primer puesto del Grupo D con nueve unidades y posicionarse entre los mejores seleccionados del torneo. Con una propuesta ambiciosa, protagonismo ofensivo y talento individual, el conjunto nacional se transformó en uno de los candidatos al título.

La “Albiceleste” no sólo destacó por sus resultados, sino también por el funcionamiento. Alejo Sarco, autor de tres goles, se consolidó como una de las figuras ofensivas, mientras que Maher Carrizo se transformó en el motor creativo, con 11 pases clave que lo ubican como el futbolista con mayor generación de juego en lo que va del Mundial. El equipo de Placente combina intensidad, precisión y frescura, respaldado por un grupo que se conoce desde los torneos juveniles de 2023 y 2024. El duelo ante Nigeria traerá recuerdos y desafíos. Será el tercer enfrentamiento entre ambos seleccionados en un Mundial Sub 20, con antecedentes que marcan dos caras de una misma historia. El primero fue en la final de 2005 en Países Bajos, cuando dos goles de Lionel Messi le dieron el título a Argentina. El más reciente fue hace dos años, en el Mundial de 2023, cuando las “Súper Águilas” eliminaron al conjunto nacional en los octavos de final disputados en San Juan, al imponerse 2 a 0.

Nigeria llega a este compromiso como uno de los mejores terceros del torneo. En el Grupo F, que compartió con Colombia, Arabia Saudita y Noruega, sumó cuatro puntos: cayó en el debut ante los noruegos (0-1), luego venció a los árabes (3-2) y cerró con un empate 1-1 ante los “Cafeteros”. Aunque no brilló, su capacidad física y velocidad en los contragolpes lo convierten en un oponente incómodo. Como suele ocurrir con los equipos africanos en esta categoría, la potencia individual y la fortaleza en el juego aéreo son sus principales armas.

Argentina, en cambio, buscará sostener su identidad: posesión del balón, presión alta y salida limpia desde el fondo. Tras el triunfo ante Italia, el plantel disfrutó de una jornada de recuperación el domingo en Viña del Mar, antes de trasladarse a Santiago para instalarse definitivamente en la capital chilena. Allí permanecerá hasta el final de su participación, ya que, en caso de avanzar de fase, todos sus partidos se disputarán en el Estadio Nacional. Placente no planea modificaciones drásticas en la formación titular. Algunas dudas persisten en la defensa y en el ataque, pero la base del equipo se mantendrá.

El desafío para los pibes argentinos será mantener la serenidad, aprovechar su buen momento futbolístico y traducir la superioridad técnica en contundencia. Después de 14 años, Argentina intentará volver a los cuartos de final de un Mundial Sub 20, instancia que no alcanza desde 2011. La ilusión está encendida y el sueño de sumar una nueva estrella juvenil sigue firme.