“Cosecharás tu siembra”. Así comenzaba la nota del 25 de septiembre de 2001, que informaba que el pescador Sergio di Nella había atrapado un ejemplar de unos cinco kilos en el lago San Miguel. Y era su propia siembra porque, contaba, él mismo, años atrás, había sembrado allí peces pequeños, nacidos en cautiverio, y evaluó que ese enorme pez podría haber tenido ese origen.
Di Nella era permisionario de entretenimientos en el parque 9 de Julio y de vez en cuando subía a un bote a buscar mojarritas con su pequeña caña de pescar. Pero le apareció este carasius enorme y tuvo que ayudarse con un canasto para recogerlo.
Recuerdos fotográficos: 1913. ¿En qué lugar se peleó la batalla de Tucumán?En la crónica se añadía la opinión de Gustavo, un experto de un acuario, que sugirió que se trataba de un pez de colores llamado “cabeza de león”, de la familia de los carasius, que tiene su cola comida, y que al no estar en cautiverio creció de forma atípica al alimentarse con las algas u otras plantas del fondo del lago. “Cuanto más grande el hábitat, más crece el ejemplar”, añadió.
La experiencia del “mojarritero”, publicada en LA GACETA, dio lugar a una llegada masiva al espejo de agua de pescadores aficionados, ilusionados con los pececitos de colores del enorme acuario del parque.