Una cena en Ibiza terminó en polémica después de que dos clientas denunciaran un sobrecargo ilegal en la factura de un restaurante de la isla. Lo que parecía una velada normal acabó en sorpresa cuando, al recibir el ticket, descubrieron un concepto inesperado: 26,20 euros añadidos como “servicio”, sin que este figurara previamente en la carta.

Según informó Diario de Ibiza, la cuenta final ascendió a 288,20 euros. Entre los precios incluidos, había importes ya de por sí elevados: 5 euros por una botella de agua, 48 por un solomillo, 25 por una ensalada o 8 por una ración de espinacas. Sin embargo, la polémica surgió con el recargo extra, considerado ilegal por la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) al no estar detallado en la carta del local.

Ante la situación, las clientas decidieron no dejar propina y se plantean presentar una hoja de reclamaciones contra el establecimiento, cuya dirección no ha trascendido.

Reacciones en redes sociales

La denuncia saltó rápidamente a las redes después de que el perfil especializado Soy Camarero compartiera el caso en X (antes Twitter). La publicación superó las 163.000 visualizaciones en pocas horas y generó un intenso debate.

Entre los comentarios, algunos usuarios defendieron que este tipo de recargo es habitual en Ibiza:

- “En Ibiza no pagas por comer, pagas por el privilegio de que te claven con sonrisa”, ironizaba un usuario.

- “Hace dos semanas estuve en la isla y es cierto: muchos sitios añaden un 10 o 15% de cargo. Pero si lo rechazas, lo quitan”, añadía otro.

La polémica vuelve a poner sobre la mesa la opacidad de algunos establecimientos en zonas turísticas y el desconocimiento de los clientes sobre sus derechos. Según la OCU, cualquier suplemento debe estar indicado de forma clara en la carta, de lo contrario se considera una práctica abusiva y el consumidor no está obligado a pagarlo.