En un contexto desafiante, pero lleno de posibilidades, industriales tucumanos comparten su mirada sobre la realidad del sector productivo local. Los empresarios de distintos rubros analizan cómo enfrentar las crisis, recuperar competitividad mediante innovación y sostenibilidad, y construir alianzas clave entre PYMEs y grandes empresas. Con la vista puesta en 2030, proponen una estrategia de desarrollo que transforme las dificultades actuales en oportunidades concretas para el crecimiento de la industria.

Horacio José Paz, de Industrias químicas y mineras Timbó SA (rubro alimentos)

-¿Cómo puede la industria combinar innovación tecnológica y sostenibilidad para recuperar competitividad?  

-En primer lugar, invirtiendo en bienes de capital e incorporando nuevas tecnologías y prácticas industriales acordes a los estándares de clase mundial.  La eficiencia genera un ahorro de recursos, que implica un menor consumo de MP y energía, entre otras cosas, lo que impacta positivamente en la sostenibilidad.

- ¿Qué alianzas entre PyMEs y grandes empresas son clave para enfrentar la competencia global?  

- Es vital una política que integre a las PyMEs con las grandes empresas.  Una forma es incorporándolos en la cadena de valor, como proveedores. Esto genera un efecto multiplicador de la actividad industrial. Produce polos productivos que constituyen círculos virtuosos, ya que permite reducir costos, como los logísticos o de escala. Al mismo tiempo, se genera valor en la región.

- ¿Qué visión estratégica debería guiar a la industria hacia 2030?

- La industria siempre se caracterizó por una visión de largo plazo.  La apertura económica genera amenazas evidentes, pero también oportunidades por el acceso a nuevos mercados.  Es vital una mejora en la infraestructura y en las comunicaciones que abarate los inmensos costos logísticos que tenemos.  Es importante que la industria pueda descubrir y trabaje por esos nuevos mercados.

Luis D´Andrea, de Grupo MP (Industria Manufacturera-Agro)

- ¿Cómo puede la industria argentina combinar innovación tecnológica y sostenibilidad para recuperar competitividad?

- La clave está en pensar la innovación como un proceso transversal y no solo como una cuestión tecnológica. La industria argentina tiene un potencial enorme para innovar desde el diseño de sus procesos, la eficiencia energética, la digitalización del conocimiento operativo y la trazabilidad de productos, hasta la implementación de tecnologías limpias adaptadas al contexto local. Desde nuestra experiencia, integrar soluciones de automatización, inteligencia de datos y energías renovables en procesos industriales tradicionales, como lo hicimos en la planta cerámica y en nuestras operaciones agrícolas, nos permitió no solo mejorar costos y calidad, sino también reducir nuestra huella ambiental. La sostenibilidad deja de ser un costo cuando se transforma en un vector de competitividad. Para que esto escale, necesitamos condiciones macroeconómicas estables, financiamiento accesible para la inversión en tecnología, y una agenda público-privada que promueva normas claras, incentivos fiscales y simplificación burocrática. Si alineamos innovación con sostenibilidad y estrategia, Argentina puede ser referente regional y mundial en producción responsable.

- ¿Qué alianzas entre PyMEs y grandes empresas son claves para enfrentar la competencia global?

- El futuro pasa por ecosistemas colaborativos. Las grandes empresas pueden ser plataformas de desarrollo para PyMEs innovadoras, facilitando acceso a mercados, transferencia tecnológica y estándares de calidad internacionales. Y las PyMEs, por su agilidad, flexibilidad y cercanía al territorio, pueden aportar soluciones específicas y acelerar procesos de transformación en las grandes compañías. Un modelo virtuoso es aquel donde PyMEs y grandes co-diseñan cadenas de valor eficientes, sostenibles y exportables. Esto exige confianza, reglas claras, asociatividad inteligente y una visión compartida de largo plazo.

- ¿Qué visión estratégica debería guiar a la industria hacia 2030?

- Argentina necesita una estrategia industrial que combine mirada de largo plazo, competitividad sistémica e inclusión social. La visión 2030 debería contemplar al menos cinco ejes:

• Productividad basada en conocimiento: digitalización, datos, automatización, inteligencia artificial aplicada a procesos industriales y agrícolas.

• Desarrollo federal: fortalecer polos productivos regionales, con infraestructura, energía y conectividad adecuados, pensando en aprovechar las ventajas competitivas de cada región y atenuando las asimetrías que existen en infraestructura para permitir un desarrollo integral del país.

• Sostenibilidad como ventaja: estándares ambientales y sociales que abran mercados internacionales, donde el capital humano sea el motor -educación técnica, formación dual y liderazgo transformador-, dentro de un marco de reglas previsibles e incentivos a la inversión: marco normativo que premie la innovación, la formalidad y la exportación, donde la PyME sea protagonista del modelo. En definitiva, la industria tiene que recuperar un rol estratégico como generadora de empleo de calidad, divisas y arraigo territorial. Para eso necesitamos un pacto entre el sector público, privado y académico, que vaya más allá del ciclo político.

Ana Florencia Andriani, Metalar SA (metalmecánica)

- ¿Cómo puede la industria combinar innovación tecnológica y sostenibilidad para recuperar competitividad?

- Hoy, las nuevas tecnologías nos atraviesan todas nuestras actividades.  Debemos estar preparados para hacer el correcto uso de  ellas para potenciar nuestros trabajos y entender que ya son una realidad.

- ¿Qué alianzas con las PyMes son clave para enfrentar la competencia global?

- Lo ideal sería reflotar el concepto de cadenas de valor, para optimizar nuestros recursos apuntando a ser más competitivos. Hoy, hay que analizar cada actividad con detenimiento para que se puedan brindar soluciones a medida a cada sector y así tener cadenas productivas más sustentables y rentables.

- ¿Qué visión estratégica debería guiar a la industria hacia 2030 para convertir desafíos en oportunidades?

- Es muy importante  no dejar de contemplar los ODS como guías, el mundo tiene los ojos en la sustentabilidad; debemos pensar en ella no como un concepto ambiental, sino más macro. Que con mejores prácticas podamos tener mejores y más  empresas competitivas.

Javier Riccio, de La Martina SRL (servicios agrícolas)

- ¿Cómo puede la industria argentina combinar innovación tecnológica y sostenibilidad?

- Una de las claves es el uso de la tecnología, ya que nos permite trabajar con mayor eficiencia y de forma más limpia, por decirlo así. En Tucumán ya vemos cómo los ingenios y la industria citrícola utilizan la biomasa para generar energía. Además, los residuos de la citricultura se transforman en insumos para exportación. Esta combinación nos permite reducir costos, cumplir con normativas internacionales y diferenciarnos en mercados que valoran -y remuneran- la sostenibilidad.

- ¿Y las alianzas entre PyMEs y grandes empresas?

- El clúster regional, por así decirlo, juega un rol clave. Una PyME aporta agilidad e innovación, mientras que una gran empresa aporta escala y financiamiento, lo que muchas veces abre la puerta a nuevos mercados. En este contexto, la asociación entre PyMEs y grandes empresas es fundamental. Se trata de una alianza de proximidad, en la que cada parte contribuye con lo que mejor sabe hacer. Por ejemplo, la prestación de servicios por parte de una PyME puede permitir que una gran empresa se enfoque en la producción de bienes con mayor valor agregado, sin tener que ocuparse de tareas complementarias. Pensemos en una empresa citrícola que, en lugar de encargarse de la cosecha, se dedique exclusivamente a la elaboración de jugo de limón. Esa tarea podría tercerizarse en una PyME especializada, logrando así mayor eficiencia para ambas partes.