Un nuevo hecho de extrema violencia de género conmociona a Rosario. Un hombre de 50 años fue detenido acusado de secuestrar a su expareja y atacarla con ácido en distintas partes del cuerpo con el objetivo de borrarle los tatuajes. La fiscalía lo imputó por lesiones graves y privación ilegítima de la libertad, cargos por los que permanecerá en prisión preventiva.
Según la denuncia, el ataque se produjo entre el 14 y el 18 de agosto, cuando el acusado, identificado como Leonardo S., mantuvo cautiva a la mujer en su casa. La víctima, de 36 años, recién pudo escapar el 22 de agosto, aprovechando un descuido de su agresor.
Un amigo la recibió en su domicilio y la asistió hasta que, dos días después, decidió trasladarla al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA). Allí los médicos confirmaron que tenía quemaduras de primer y segundo grado en el 30% de su cuerpo. Aunque está fuera de peligro, permanece internada bajo tratamiento.
El caso quedó en manos de la fiscal Guillermina Torno, quien relató ante el juez Rodrigo Santana cómo el imputado obligó a la mujer a desnudarse y sentarse en una silla tras una discusión, para luego aplicarle una sustancia química en brazos, piernas y espalda con el fin de “borrarle” los tatuajes.
Los análisis forenses confirmaron que las lesiones se produjeron al menos una semana antes de que la víctima lograra denunciar el hecho.
La fiscalía recordó además que en enero de 2024 la mujer ya había denunciado a Leonardo S. por amenazas calificadas y lesiones, y advirtió que, pese a la separación, la víctima retomó el vínculo “por temor”.
El juez Santana dispuso la prisión preventiva del acusado y ordenó que se le realice una evaluación psiquiátrica para determinar su estado de salud mental.