A solo una hora de Barcelona, en Montferri, se encuentra una joya arquitectónica poco conocida que muchos comparan con la Sagrada Família. No porque sea obra de Gaudí, sino por su estética modernista, fruto del talento de Josep Maria Jujol, estrecho colaborador del arquitecto. Popularmente, algunos lo llaman la “pequeña Sagrada Família”, en parte por su tiempo de construcción de casi un siglo.
Historia y arquitectura del santuario
El Santuari de la Mare de Déu de Montserrat de Montferri comenzó a edificarse en 1925 y fue inaugurado finalmente en 1999, tras interrupciones por falta de fondos y la Guerra Civil Española.
Su estructura única emula un barco orientado hacia Montserrat, con cúpulas y pilares que recrean el perfil del macizo, recordando un mini skyline de Cataluña. Su interior combina la sobriedad de los materiales grises (principalmente cemento) con vidrieras de color, arcos parabólicos y formas redondeadas inspiradas en la naturaleza, invitando a los visitantes a capturar cada rincón con la cámara.
Un destino imprescindible para los amantes del modernismo
El santuario es un destino ideal para quienes buscan arquitectura modernista lejano del turismo masivo, ofreciendo un contraste entre diseño exterior icónico y un interior que sorprende por su luz y formas.
Cerca de Montferri, la zona ofrece más reliquias arquitectónicas como:
Casa Bofarull en Els Pallaresos: masía modernista de Jujol con coloridas cerámicas, arcos y escaleras hexagonales.
Reial Monestir de Santes Creus: monasterio con arquitectura del Císter, similar a Vallbona de les Monges y Santa Maria de Poblet.
Cómo llegar
Desde Barcelona, el Santuari de Montferri se encuentra a aproximadamente una hora en coche, cerca de Valls y Tarragona, lo que permite combinar la visita con otros puntos de interés modernista y medieval en la región.