Valentín Perrone se convirtió en la gran noticia del motociclismo argentino. A sus 17 años, el joven corredor logró la primera pole position de su carrera en Moto3 y largará en la primera fila del Gran Premio de Austria, en el circuito Red Bull Ring de Spielberg. Su tiempo de 1:39.938 en la clasificación lo colocó por delante del español Ángel Piqueras (1:39.984) y del japonés Ryusei Yamanaka (1:40.084). Una marca histórica para un piloto que recién comienza a mostrar su potencial.

La pole tiene doble valor. Para Perrone es un paso enorme en su carrera profesional, apenas meses después de debutar en la categoría. Y para la Argentina, significa volver a tener un representante en lo más alto de la grilla de largada luego de cuatro años: la última pole de un piloto albiceleste había sido la de Gabriel Rodrigo en 2021 en Cataluña. Rodrigo, también nacido en España pero hijo de argentinos, había dejado su huella con seis poles antes de retirarse en 2022.

Aunque nació en Barcelona, Perrone decidió correr bajo la bandera argentina como homenaje a sus orígenes. Su padre, Marcelo, emigró en 1998 en busca de trabajo y sacrificó años de esfuerzo y jornadas sin descanso para sostener la carrera de su hijo. Ese lazo, sumado a la pasión heredada, lo llevó a representar a la Argentina en el ámbito internacional. Su vínculo con el país se reforzó este año, cuando viajó por primera vez a competir en Termas de Río Hondo, en Santiago del Estero. Allí conoció Buenos Aires, destacó la pasión de la gente y confesó sentirse más cerca que nunca de la tierra de sus padres.

El camino de Valentín en Moto3 no fue sencillo. Tras ascender de la Rookie Cup, donde había terminado tercero en 2024, sufrió tres abandonos consecutivos al inicio de la temporada, incluido un accidente en el Gran Premio de Argentina. Pero poco a poco comenzó a encontrar regularidad: 15º en Qatar, 10º en España y Francia, 5º en Gran Bretaña, 13º en Aragón y 8º en Italia. El punto de quiebre llegó en los Países Bajos, donde consiguió su primer podio con un tercer lugar. Con esos resultados, llegó a Austria ubicado en la 13ª posición del campeonato de pilotos con 63 puntos, muy lejos todavía del líder José Antonio Rueda (228), pero demostrando que su proyección es enorme.

La clasificación en Austria no solo marcó su despegue: también dejó una frase que ilusiona. “Hoy tiene que ser el día, hoy tiene que ser P1. Mañana vamos a tratar de repetir y de ganar el P1”, declaró tras bajar de la moto. Consciente de que tiene un buen ritmo, confía en poder mantenerse en el grupo de punta y dar pelea en las últimas vueltas.

Con diez carreras aún por delante, Perrone se prepara para buscar su primera victoria y seguir alimentando las ilusiones del motociclismo argentino. El domingo, desde la pole, puede comenzar a escribir una historia grande que recién arranca.